Se remonta ya a hace diez años el primer caso de traciabilidad RFID en el mundo Fashion: G&P Net (marcas Peuterey, Geospirit).
Desde entonces se ha recorrido un largo camino y ha aumentado el número de empresas del Fashion&Luxury que han decidido adoptar esta tecnología. El mayor impulso llega de las exigencias de los retailers, como nos cuenta nuestro RFID Specialist in primis: la búsqueda incesante para satisfacer las exigencias multicanal, la voluntad de mejorar la Customer Experience, la necesidad de exactitud en los datos de existencias e inventarios.
Todo parte de la identificación unívoca de cada prenda.
Esto significa que, si a dos prendas idénticas por talla, modelo y color, se les aplica un tag RFID, cada una de estas dos prendas será única y podrá ser identificada de manera precisa a lo largo de toda la cadena de producción, de la fábrica a la tienda. Con el código a barras esta distinción no existe y, además, cuando se trata de leer muchos artículos a la vez, se podría leer la misma prenda más de una vez o bien no leerla sin darnos cuenta. Con el RFID no es necesario ver el objeto para poder identificarlo. Este vídeo ejemplifica su funcionamiento y la utlización de la tecnología RFID en el mismo puede ayudarnos a comprender las potencialidades de este sistema.
Poder hacer el seguimiento de cada prenda desde la producción a la logística y desde la logística a los puntos de venta autorizados y comprobar que la mercancía se encuentra en el canal distributivo correcto, son exigencias que han empujado a una de las marcas más conocidas en todo el mundo de la moda urban y outdoor a adoptar una solución de optimización del proceso productivo-logístico y de lucha contra el mercado gris basándose en el RFID.
Antes de la llegada de esta tecnología, no existía la certeza de una efeciva correspondencia entre lo que se encargaba al productor y lo que de hecho se producía o de que una prenda llegase a un punto de venta predefinido. Ahora el brand puede controlar con precisión y velocidad la mercancía recibida y garantizar que las prendas van enviadas correctamente a sus canales distributivos.
La solución adoptada permite al brand verificar en cada momento el respeto de los acuerdos pactados con los partners a lo largo de toda la supply chain: la lucha contra el mercado gris y la traciabilidad de los artículos no pasan jamas de moda.